El fallo de los inversores no solo significa problemas técnicos, sino dinero en efectivo que se escapa de sus manos. Estas pérdidas pueden ser significativas y dependen de muchos factores: su tarifa de alimentación, la capacidad de su inversor y las valiosas horas de sol que pierde durante el tiempo de inactividad.
Sin embargo, el conocimiento es poder. Para devolverle el control, le ofrecemos nuestra calculadora de pérdida de rendimiento. Con esta herramienta, obtendrá de inmediato un valor de comparación claro, preciso, comprensible y adaptado a sus condiciones individuales.
Así que puede decidir sabiamente: ¿hay suficiente tiempo para reparar el inversor o es más eficiente comprar una pieza de repuesto disponible? ¿Qué tan rápido debería actuar?
Nuestra calculadora le dará la respuesta para que pueda evaluar mejor el análisis costo-beneficio de sus decisiones. Porque al final del día, no se trata solo de resolver problemas, sino de sacar el máximo provecho de su inversión.